Al conducir, a menudo suele pasarnos que, de pronto y sin previo aviso, un carro, ciclista o motociclista nos rebasa, aun sabiendo que, apenas un segundo antes, miramos por los espejos y podríamos haber jurado que “no había nadie allí”; este fenómeno ocurre gracias a los llamados puntos ciegos de un carro.
No queremos decir que este conductor apareció por arte de magia de un momento a otro o que se teletransportó justo al lado de nuestro carro. Por el contrario, todo el tiempo estuvo allí, pero colocado en la zona más peligrosa, exactamente en el punto en que resulta invisible para el conductor del auto.
Hay zonas específicas del coche donde, por más que se haya mirado antes por los espejos retrovisores o el parabrisas, no podemos ver si hay otro vehículo o persona detrás de ellos. Se trata de los “ángulos muertos”, también conocidos como puntos ciegos.
En el paseo de hoy, te vamos a decir específicamente qué son y cómo evitarlos, ya sea que seas peatón, ciclista, motociclista o automovilista. Presta atención a los siguientes consejos y cuida tu vida.
¿Qué son los puntos ciegos de un carro?
Los puntos ciegos de un carro son todas las zonas del vehículo que quedan fuera de la visión del conductor, aun si este mira correctamente por los espejos retrovisores. Todos los coches los tienen y, mientras más grande sea el auto, más grandes son los ángulos muertos.
¿Por qué? Fácil: porque los puntos ciegos se ubican en los marcos o bordes de la carrocería, aunque también pueden presentarse en pilares del parabrisas o los reposacabezas. Es por ello que, mientras más grande sea un automóvil, sus ángulos muertos también serán más grandes.
Cuando un usuario de la vía se coloca en estas zonas, es imposible verlo desde el interior del automóvil, ni siquiera haciendo uso de los espejos. De allí que estas sean una de las mayores causas de accidentes viales como choques y atropellos.
¿Por qué ocurre?
Todo este asunto tiene una explicación física o, mejor dicho, geométrica:
Los espejos retrovisores brindan un campo de visión que queda delimitado por la línea recta que sale de nuestros ojos. Por ello, nuestro campo de visión únicamente se extiende por cada uno de los bordes de los espejos y se extiende hacia atrás. Todo aquello que quede fuera de esa zona se vuelve invisible para nosotros.
Los puntos ciegos de un carro estarán ubicados dependiendo de la clase y automóvil que conduzcas. Es importante que sepas dónde se ubican para reducir la probabilidad de una colisión o atropello:
Consejos para evitar los puntos ciegos de un carro
Aunque los ángulos muertos están presentes en todos los coches y no es posible eliminarlos, sí hay diversas medidas y consejos que podemos tomar para aminorar los riesgos. A continuación te presentamos los más útiles:
Ajusta los espejos
Al conducir, los espejos laterales y el retrovisor son tus mejores aliados, además de que su uso forma parte de las reglas básicas para conductores principiantes. Si bien no es posible ver a 360° por ellos, bien ajustados te darán un mejor y mayor campo de visión, reduciendo un poco los ángulos muertos. Utiliza tus espejos en todo momento, y no solamente cuando necesites cambiar de carril.
Un pequeño truco es acercarte un poco al retrovisor; al hacerlo, tendrás un campo de visión ligeramente más amplio que el que miras manteniendo tu cabeza pegada al asiento.
Gira la cabeza al incorporarte
Aunque los espejos te darán un buen campo de visión cada vez que cambies de carril o te incorpores a otra vialidad, lo mejor será que también gires un poco tu cabeza para asegurarte que no tienes cerca otro vehículo a los lados. Hazlo de manera rápida, pero segura, así tampoco perderás de vista lo que tienes frente a ti.
Anticípate a otros conductores
Aprender a tener una conducción defensiva despertará en ti el instinto de anticiparte a los movimientos de otros conductores. Podrás deducir cuál será su siguiente movimiento, a dónde cambiarán de carril y en qué momento.
Asimismo, aprenderás a no confiarte, por ejemplo, si a lo lejos viste un carro/moto/ciclista por el espejo y de pronto ya no lo ves, lo primero que pensarás es que quizá está en uno de tus puntos ciegos; de esta manera, esperarás un poco para volver a tenerlo a la vista antes de cambiar de carril.
Utiliza todas las advertencias
Como automovilista, también puedes avisar a otros conductores tu siguiente paso. Por ejemplo, si vas a girar o a hacer un cambio de carril, lo mejor será avisarlo al hacer uso de las intermitentes. No importa si no ves a alguien a tu alrededor y quizá vas solo sobre la vialidad, quién sabe, quizá en ese justo momento hay alguien más en tu ángulo muerto.
¡Cuidado, peatón, también es tu responsabilidad evitar los puntos ciegos de un carro!
Ok, puede que no tengas coche, pero quizá sí una bici, una moto, un scooter eléctrico o te guste salir a pasear a pie. En estos casos, como peatón u otra clase de conductor, también debes tener las precauciones de no colocarte en los puntos ciegos de un carro.
Un desplazamiento responsable depende de todos. Respetemos la pirámide de la movilidad y las normas de vialidad correspondientes a cada uno de nosotros.
